Si hay algo que experimentamos el personal profesional que aún no teniendo una larga vida laboral tenemos una amplia experiencia en contratos temporales o contratos de obra y servicio, es lo relevante que es saber relacionarse con los compañeros de trabajo (también es ampliable a los afortunados que están en un mismo puesto de trabajo durante años).

Hacemos este post, porque experimentamos continuamente una carencia de personal que será muy cualificado ( o simplemente muy listo) pero, que no sabe o no quiere relacionarse profesionalmente en un equipo y no nos queda otra aunque sea para desahogarnos, compartir los problemas que hemos ido detectando y nuestras propuestas de soluciones. Compartir vuestras experiencias y más importante, vuestras propuestas de solución.

Aprovecha para plantearte cómo eres, qué careces, qué puedes mejorar…e incluso trabaja en este tema si eres de las personas que tiene miedo a ser parte de un equipo (clave la diferencia en este caso de ser y estar).

Si te incorporas a un nuevo trabajo/equipo, tendrías que:

  • Conocer el sitio nuevo, paralelamente ir dándote a conocer poco a poco e intentar encajar en el grupo. Para esto, hay que darse tiempo y tener inteligencia emocional.
  • Analizar distintos aspectos, como la tradición de la entidad, el método de trabajo existente (sí es bueno o malo lo valoraremos más tarde), valores de la entidad (ya sean los que se exhiben como los reales de la entidad).
  • Detectar las fortalezas y las debilidades del equipo donde vas a desarrollar tu trabajo. Conocer el historial de cada uno de tus compañeros, sin hacer comparaciones ni entrar en temas personales. Ver qué puedes aportar en ese análisis y hacer ese mismo examen con tus compañeros. Esta acción puedes desarrollarla por fascículos ( sí queréis, puedo crear un excel para, ¿por qué no creamos…?) como directamente en una reunión de equipo ( en estas semanas que llevo, he detectado una carencia de….y propongo que hagamos…)
  • Valorar, después de un tiempo determinado de análisis de la información inicial recopilado, qué es lo realmente importante entre las tareas a acometer y que esté vinculado con el objeto de tu contrato. 
  • Diseñarte una metodología personal que ayude a lograr estos objetivos y funciones. Y crear tu rutina nueva. Este punto como el anterior, lo añadimos porque vemos ese perfil repetitivo de la persona que aplica de manera casi-automática el método del puesto en el que estuvo 6 años o incluso el No- método – déjame, que en mi caos yo trabajo estupendamente-
  • Contrastar tu rol con el de los compañeros y ver cómo están siendo los resultados, entre los resultados puede aparecer que hay funciones imprescindibles que se quedan sin persona asignada, siendo uno de los problemas más sencillos de resolver pero que cuesta asumir. Aplica sinceridad, confianza, la información y tus conocimientos como las capacidades que tienes y las que has ido asumiendo estas semanas de inicio para evaluar cómo está siendo la realidad del equipo.
  • Aplica creatividad para configurar vuestra nueva metodología más práctica para todos vosotros. Y obtener una motivación grupal que será la forma de trabajar en un ambiente más atractivo para todos.

Si eres de los que llevas tiempo en un mismo trabajo, enhorabuena y deberías:

  • Empatizar con aquél que entra (ya sea nueva persona como aquél compañero que ya estaba pero que le toca cambiar), ya sea porque has estado en ese punto y sabes que no es cómodo para el que entra como el compañero que mueve y es novato en sus nuevas tareas.
  • No sigas en la comodidad de “quiero todo igual” porque eso cansa, no es eternamente funcional y no es justo para el que quiera aprender, hacer cosas y aportar su personalidad al equipo y trabajo. Y sí eres de lo que le gusta el plan “cada uno a lo suyo mientras salgan los resultados/paguen” caes en un grave error porque al final te estás perdiendo uno de los pilares más bonito que hay en las profesiones LO HUMANO y el TRABAJO EN EQUIPO.
  • Sé flexible, receptivo y escucha a las voces que entran. El aire fresco siempre se agradece. Es una forma de renovarte. Comparte tu experiencia, sé crítico pero siempre que quieras mejorar ya que las personas que os dedicáis a criticar lo mal que se hace las cosas y hacer un exhaustivo análisis de lo negativo pero no haces nada al respecto, te diríamos (si pudiéramos) que eres ya parte de ese mal que criticas.
  • Usa la herramienta de la evaluación continúa. Ya sea a ti mismo como al equipo. Y una evaluación conlleva saberla hacer, así que dedícale una tarde para saber qué buscas con esta herramienta y sea cuales sean los resultados de la evaluación crea el momento de cómo mejorar aquello que necesitamos como aquello que debemos mantener y cuidar porque funciona.

Terminamos, aunque creemos que esto tendremos que ampliar, con material tuitero que nos ha inspirado y servido para crear este post:

Escrito por:helloyoungstersblog

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